viernes, septiembre 08, 2006

no droguen más al toro, droguénme a míiiiiiiiiiiiiii...

Avanzan los días y a cada momento me entusiasma más el concierto de Bersuit al que iré mañana. Yo descubrí a ¿la? Bersuit hace como siete años con la monumental Señor Cobranza, aquella furiosamente transgresora canción que los propulsó a la fama mtvidiana, un tema extraido de su álbum Libertinaje. A partir de entonces, no sé qué pasó pero me desconecté por completo de estos argentinos, pero de unos meses para acá, los redescubrí y señor, qué revelación.

Honestamente, no sé si sonaran a un desmadre de mil cosas al mismo tiempo, pero con Libertinaje los disfruté, me reí, y se acabó; pero a partir de Testosterona, su último disco, me he dado cuenta de lo inusitado e increíblemente gratificante que resulta Bersuit Vergarabat. Esa facilidad para girar diametralmente su estilo de una canción a otra, abordándolo de la manera más antisolemne e irreverente -sin caer en lo maniqueo- conservando momentos de sobriedad cuando es adecuada, y mucha solidez y oficio musical para cada género que abarca su propuesta (que va desde el ska, reggae, folk, hip-hop, cumbia y creo que hasta merengue), complementado con un trabajo letrístico de lo más inteligente, ingenioso, vigente y mordaz, me hace pensar que lo de mañana estará muy bueno. Y la verdad, Testosterona es una maravilla, completo, variado y francamente ambicioso como pocos.

Este amanecer en mi gusto por Bersuit se debe en buena medida a la majestuosa "Sencillamente", cuyo video era mi intención pegar aquí, pero la ún ica versión en youtube es de muy mala calidad y la verdad tenemos ciertos estándares (muy bajos pero ahí están). Mientras tanto, disfrutemos (¡todos juntos!) del flamenco de La del toro, del disco Hijos del culo:



Chingada madre, me rehusaba a postear Sr. Cobranza con censura, pero con todo y todo el video es una cosa espectacular.



Por cierto, creo firmemente que Gustavo Cordero es de los mejores vocalistas del rock hispano, con una voz distintivísima y con mucha personalidad, gritona y desenfadada pero llena de relieves de un gran rango y muchísimo feeling (ahí está el también excelente video de Yo). Ya quiero que sea mañana.

lunes, septiembre 04, 2006

de homoeroticismo ochentero y cómo nos gustan las niñas chiquitas

Ante el insistente y multitudinario clamor de que ''bloguee más'' (por cierto, el único comentario en como tres semanas, cabrones), y teniendo en cuenta el contundente impedimento que implica la falta de Internet, supongo que tendré que seguir posponiendo el gran final de los posts donde anticipamos películas que prometen muchos hasta que termine mi mudanza y pueda instalar Internet, y provicionalmente saciarlos (ejem) con un poco de homoeroticismo ochentero responsabilidad de un par de dioses, Mick Jagger y David Bowie, y su ochentera rendición de Dancing in the street, grabada como parte de lo de Live Aid.



Y bueno, ya que estamos en esto, otra joyita ochentera del casi mejor grupo de dicha década, Oingo Boingo, con la canción Little girls y la delirante actuación de Danny Elfman como conflictuado -pero finalmente resignado- pederasta.